MILÁN EXPRÉS

En nuestra ruta exprés por Italia hemos visitado Milán en un día, en 12 horas exactamente y Bérgamo en otro día, sí, es viable. Os contamos que ver y hacer en Bérgamo en otra entrada.


Llegamos  a Milán desde Bérgamo, ya que nuestro avión llegaba allí, a las 10: 00 de la mañana y pusimos rumbo desde la estación de tren hasta la plaza del Duomo de Milán.


Para llegar al Duomo pasamos por El Cuadrilátero de la Moda  conocido como el Quadrilatero d'Oro.

Es un distrito exclusivo que representa el lujo y la moda en su máxima expresión.

Delimitado por cuatro calles principales, de ahí lo de su nombre de cuadrilátero: Via Montenapoleone, Via della Spiga, Via Manzoni y Corso Venezia. Estas calles albergan boutiques de marcas de alta costura como Gucci, Prada, Armani y Versace.

Este distrito comenzó a consolidarse como el epicentro de la moda en los años 70 y 80, cuando diseñadores como Giorgio Armani y Gianni Versace abrieron sus primeras tiendas en la zona.

Aunque la cartera no te alcance para poder entrar en sus tiendas y hacerte con algún "souvenir" es toda una experiencia, si te gusta la moda, pasear por sus calles y admirar sus escaparates.

Plaza del Duomo

No te puedes perder esta maravilla arquitectónica que llevó siglos ya que se empezó a construir en 1386 y no se completó hasta 1965.

Fue hecho con mármol de Candoglia, transportado desde las canteras cercanas al Lago Maggiore a través de canales artificiales.

Cuenta con 3,400 estatuas y 150 gárgolas, cada una con detalles únicos. Algunas de las estatuas son anteriores al descubrimiento de América.

En su aguja más alta se encuentra la estatua de la Madonnina, que estuvo cubierta durante la Segunda Guerra Mundial para evitar ser un blanco fácil para los cazabombarderos.


Como curiosidades contarte que dentro del Duomo hay un reloj solar de casi 20 metros incrustado en el pavimento de mármol blanco. Fue creado por astrónomos de la Academia de Brera.

Y fue Napoleón Bonaparte quién ordenó acelerar los trabajos para que la fachada estuviera lista para su coronación 1805.

Para sacar unas mejores fotos del Duomo os aconsejamos ir a la tarde ya que por la mañana le da el sol y las fotos no son las mejores e ingeniártela para sacar a menor gente posible.

Se puede subir a las terrazas del Duomo, es algo interesante y que nos ha gustado, la verdad, estar ahí arriba, encima de años de historia y ver la plaza desde arriba es mágico. Para ello, hay que comprar entrada, bien, entrada al Duomo + subir por escaleras o entrada al Duomo + subir por ascensor. Nosotros, subimos por escaleras, no son muchas pero tampoco pocas y nos costó la entrada unos 21€ persona. La fila para entrar a ver el Duomo está en la misma plaza y para subir a las terrazas, las escaleras están a su lado izquierdo y la fila al ascensor está cerca de la fila para las escaleras.

La gente sube primero a las terrazas y a la bajada como hay que pasar por el dentro del Duomo, ven el Duomo, nosotros, no sabíamos esto e hicimos al revés.

Galeria Vittorio Emmanuel II

Son conocidas como el "salón de Milán" debido a su importancia como punto de encuentro social y cultural desde su inauguración en 1867y conectan la Piazza del Duomo con la Piazza della Scala, donde se encuentra el famoso teatro de ópera La Scala.

El arquitecto creó una bóveda de hierro y cristal impresionante pero no llegó a verlas inaugurar ya que falleció en un accidente en su construcción.


Es uno de los centros comerciales más antiguos del mundo y alberga boutiques de lujo, restaurantes gourmet y cafeterías históricas, como el famoso Café Biffi.

y no te puedes ir de ellas sin girar tres veces sobre toro ubicado en el suelo de mosaico, en el centro octogonal de la galería ,ya que según la tradición, girar tres veces sobre el talón en sus testículos trae buena suerte.

Arco della Pace

Se llega a el una vez visitado los jardines del Castillo Sforcezco y saliendo de estos, atravesando el parque Sempione.

Está inspirado en el Arco de Tito en Roma, que celebra la conquista de Jerusalén por el emperador Tito en el año 70 d.C

Comenzó a construirse en honor a Napoleón, pero finalmente se dedicó a la paz tras el Congreso de Viena.

En sus paredes están grabados los nombres de 128 batallas y 558 generales que participaron en las guerras napoleónicas. Los nombres subrayados corresponden a los generales que murieron en combate.

Bajo el arco se encuentra la tumba del Soldado Desconocido, que representa a los combatientes franceses caídos durante la Primera Guerra Mundial. Desde 1920, una llama eterna se enciende cada día en su honor.


Cómo curiosidad os contamos que en 1919, el piloto Charles Godefroy voló su avión de combate a través del arco como homenaje a los aviadores muertos en la Primera Guerra Mundial y que antes de pensar en que tuviera forma de arco se propuso un edificio con forma de elefante gigante.

Iglesia Santa Maria delle Grazie y "La Última Cena"

La iglesia construida entre 1463 y 1482 y el refectorio que alberga "La Última Cena" fueron declarados Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1980 debido a su importancia histórica y artística.

"La Última Cena" fue pintada entre 1495 y 1498 directamente en la pared norte del refectorio de la iglesia. Representa el momento en que Jesús anuncia que uno de sus apóstoles lo traicionará.

Para ver el cuadro es MUY IMPORTANTE coger día y hora ( nosotros, fuimos a comprar la entrada dos meses antes y no hubo suerte).

La pintura mide aproximadamente 4.6 metros de alto y 8.8 metros de ancho, cubriendo casi toda la pared del refectorio.

Castillo Sforzesco y sus jardines

Construido en 1358 por Galeazzo II Visconti como una fortaleza defensiva. Sin embargo, tras la caída de los Visconti, fue destruido en 1447 y reconstruido por Francesco Sforza.

Da Vinci incluso diseñó algunas de sus defensas.

En el siglo XIX, el castillo fue restaurado y transformado en un complejo cultural que alberga varios museos, incluyendo obras de Miguel Ángel y Leonardo, para poder entrar al castillo hay que coger entrada.

Ahora, la entrada a sus jardines, es gratuita y si hace bueno, se puede pasar un rato agradable tirados en la hierba o comiendo algo. Alberga el parque Sempione.

Parque Sempione

Inspirado en los jardines ingleses, con caminos sinuosos, lagos artificiales y áreas boscosas. Antes de convertirse en parque, el área era conocida como la "Piazza d'Armi" y se utilizaba para ejercicios militares. 

Es hogar de diversas especies de aves y pequeños animales como tortugas, peces, patos incluso erizos.

Aunque se encuentra fuera de la fortaleza del castillo también forma parte de el y al final de este se encuentra el arco del triunfo.


Hay aseos públicos y algún lugar donde tomar algo o picar algo y un anfiteatro, inaugurado en 1806 con la presencia de Napoleón, en frente al arco de la paz.

Iglesia y osario de Bernardino alle Ossa

Se ubica cerquita del Duomo de Milán junto con la Basílica de Santo Stefano Maggiore, en la Piazza Santo Stefano, no te confundas y entres a esta. La puerta al osario es la que queda al lateral en la plaza.

La iglesia original fue construida en 1269 junto al osario.

Es un lugar fascinante y único, conocido por su osario decorado con huesos humanos. Las paredes del osario están decoradas con calaveras y huesos humanos, dispuestos en patrones artísticos debido a la falta de espacio en el cementerio cercano en el siglo XIII. Nos recordó, en menor medida, a las catacumbas de París.



Se dice que algunos de los cráneos en el osario pertenecen a personas condenadas a muerte, lo que añade un aire de misterio al lugar.

Es un lugar, que sin duda no te puedes perder y su entrada es gratuita.

Starbucks Reserve Roastery

Ubicado en la histórica Piazza Cordusio.

Fue el primero en abrir en Italia, un país conocido por su tradición cafetera. La marca quiso rendir homenaje a la cultura italiana del café con un diseño exclusivo. El local ocupa el antiguo edificio de correos y tiene más de 2,300 metros cuadrados.



Se puede observar el proceso de tostado del café y disfrutar de una amplia variedad de bebidas, desde cócteles hasta helados hechos con nitrógeno líquido.

L.O.V.E. escultura

También conocida como "Il Dito" (El Dedo), es una obra provocadora del artista italiano Maurizio Cattelan, ubicada en la Piazza degli Affari de Milán, frente al edificio de la Bolsa de Valores. 

Es un acrónimo de Libertà (Libertad), Odio (Odio), Vendetta (Venganza) y Eternità (Eternidad).

Representa una mano con el dedo medio levantado, mientras los otros dedos parecen cortados. Aunque puede interpretarse como un gesto obsceno, también se dice que simboliza la erosión del tiempo sobre un saludo romano. 


Está hecha de mármol de Carrara y mide 11 metros de altura, incluyendo su base.

La obra ha sido interpretada como una crítica al mundo de las finanzas y al pasado fascista del edificio que la enfrenta.

Fue inaugurada en 2010 como parte de una exposición temporal, pero su impacto fue tan grande que se decidió dejarla de forma permanente, a pesar de las protestas iniciales.


Esto es todo lo que puedes ver en el "centro "de Milán ahora, si tienes más tiempo y no te has cansado de andar (nosotros vimos todo e hicimos 35.000 pasos, equivale a unos 25 km, ahí es nada) os dejamos tres lugares que puedes visitar.

Cementerio monumental de Milán

Es un auténtico museo al aire libre lleno de historia y arte que si tienes tiempo no dudes en recorrerlo, eso sí, planifica muy bien la ruta ya que cierra pronto, sobre las 18:00 horas, no vaya a ser que para cuando quieras ir esté cerrado.

Justo en la entrada del cementerio se encuentra el Famedio, una gran estructura de estilo bizantino que originalmente iba a ser una iglesia. Hoy en día, alberga las tumbas de personajes ilustres como Alessandro Manzoni y Giuseppe Verdi.

Está lleno de impresionantes esculturas, frescos y mausoleos diseñados por artistas de renombre. Es un lugar donde la arquitectura funeraria del siglo XIX y XX se mezcla con el arte.

Es comparado con el famoso cementerio Père-Lachaise de París

Barrio Brera

El barrio bohemio y artístico de la ciudad. En el siglo XX, Brera era conocido por ser un barrio popular y, en algunos momentos, incluso un epicentro de la vida nocturna y la bohemia milanesa.

Su nombre  "Brera" proviene del término en latín "braida", que significa terreno baldío ya que en sus inicios, esta zona era un espacio vacío fuera de las murallas de la ciudad.

Las calles empedradas de Brera, como Via Fiori Chiari y Via Madonnina, están llenas de boutiques, cafeterías y restaurantes que ofrecen un ambiente romántico y acogedor.



En el se encuentra el Jardín botánico, con entrada gratuita y la Biblioteca Braidense con entrada gratutia pero hay que presentar un documento de identidad válido y cumplir con las normas de la biblioteca, como dejar bolsos y mochilas en los armarios disponibles en la entrada.


Barrio Navigli

famoso por sus canales comenzaron a construirse en el siglo XII para facilitar el transporte de mercancías y conectar Milán con el mar. Leonardo da Vinci contribuyó al diseño de las presas, mejorando la navegabilidad de los canales.

Los canales fueron utilizados para transportar el mármol necesario para la construcción del Duomo de Milán, lo que demuestra su importancia en la historia de la ciudad.

Hoy en día el Naviglio Grande y el Naviglio Pavese son los únicos canales que permanecen y han sido restaurados como zonas de ocio.


Es conocido por su animada vida nocturna, con bares, restaurantes y galerías de arte a lo largo de los canales. También es famoso por su mercado de antigüedades y el Callejón de las Lavanderas, un rincón histórico lleno de encanto.

Nosotros, visitamos este Navigli, un viernes y a eso de las 19:00 horas toda la gente joven ya estaba en la calle bebiendo y saliendo por los bares, parecían fiestas de cualquier ciudad o pueblo.


Qué comer el Milán

A parte de probar todo tipo de pasta no puedes perderte los panzerottis o los helados.

Los panzerottis de Luini o los helados de cualquier heladería de Milán, son riquísimos. Los helados cuestan 3.50€ de dos sabores.



Luini se ubica en una de las calles laterales por las que se llega al Duomo, lo reconocerás, porque hay una fila de gente esperando para entrar, nosotros, lo vimos y dijimos... tiene que estar bueno y nos cogimos un pazenrotti cada uno para almorzar, muy buenos y para quitar el hambre a media mañana o para merendar, perfecto. Fueron, 7€ los dos. Cogimos el de 4 quesos y el clásico.

Helado probamos de dos sitios, en la heladería MAG en via Legioni Romane 59 y Gusto 17 en Navigli. Se suele pagar primero y después ir al mostrador a pedir el helado que quieras, para tenerlo en cuenta.

Cómo moverte por Milán

Nosotros hicimos todo caminando y cogimos un par de veces el bus 94, se paga o dentro del bus o a veces, en la parada hay una máquina para sacar el ticket. Solo se puede pagar un ticket por tarjeta y cuesta 1.70€.

Lo cogimos sobre todo para acercarnos y caminar menos hacia el barrio de Navigli, desde la iglesia de San Bernardino della Ossa y para volver al mismo punto.

Hay que tener en cuenta ( por si eres alérgico o no eres muy de mascotas)  que estas son bienvenidas en restaurantes, tiendas y transportes públicos.








Comentarios

Entradas populares de este blog

Sri Lanka, un viaje especial.

París, ¿la ciudad del amor?

Imprescindibles para viajar a Tanzania/Zanzíbar.